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Es doloroso ver lo que están haciendo con la Sra. Marisa A. Sanchez, a cargo de la Delegación Buenos Aires del IPAUSS.

Me duele y ofende mucho, como una persona que, desde mi primera derivación, a fin del año 97 y principios del 98, y en otras oportunidades en que fui derivada, tuve la atención y contención adecuada, amabilidad en el trato y el diligenciamiento puestas siempre de manifiesto en los derivados, por la mencionada persona.

Me permito afirmar, sin lugar a equivocarme, que la nueva conducción que dirige el IPAUSS, no tiene otra idea que, avanzar (¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡) sobre todos, sin tener en cuenta los años trabajados y las experiencias acumuladas por el personal que fue formado, en su momento, en su lugar de trabajo.

Aquí no es una cuestión de incapacidad para dirigir una Delegación del IPAUSS, sino una cuestión de origen eminentemente político gremial, es decir se pasan factura unos a otros y desgraciadamente los que pagamos las consecuencias siempre somos los mismos, LOS AFILIADOS.

Señora Presidente y Directores del IPAUSS, los problemas políticos y gremiales se dirimen en otro lado y en otras circunstancias, el problema a resolver en la actualidad es gestionar para que se cumplan todos nuestros derechos respetando nuestros deberes.

Por lo expresado mas arriba se hace necesario solicitar se use la racionalidad antes de instrumentar medidas que producirán un atraso y descontento en los afiliados y derivados de la Delegación Buenos Aires.